Manifiesto a mis carnales...
Manifiesto a mis carnales, que el haber estado cerca de estos chicos durante estos 3 años cambio el curso de nuestras vidas, para bien o para mal, salir avantes de todas las vicisitudes es lo que importa, bien dicen que para poder salir del laberinto hay que perderse, tuvimos momentos tormentosos, gloriosos, el haberlos conocido marco la diferencia entre unos chicos de 15 años a tipos con mentes un poco antagónicas de 18.
En el principio de la historia, imagine lo peor de todo; me aferraba al cerrarme de mente y no convivir, me invadía el pensamiento lúgubre, negativo y decadente de que había quedado en el peor lugar para hacer amigos, y como por arte de magia o deidades satánicas o sagradas fueron mostrando las caras los que serían mis mejores carnales a lo largo de este gran camino.
(Risas) nunca olvidare que en un principio era sufrir por todo, estrés de clases, tareas, el que dirán los demás si... En fin el tedio me invadía, y no pudo haber sido más preciso cuando una de tantas veces estando solo me acerque a hablar al chico Alejandro Carpio Zaldivar, y todo comenzó a rotar desde ese momento, la chispa se había encendido y fue secuencial la llegada de amigos sensatos y buenos chicos. Fabián Cachon Reyes, Giovanny (Pata) Alberto Sanchez juntos hasta ese momento en el mismo salón, esparciendo la semilla de Rodrigo Ballinas Ajenor, un celebre de la risa en nuestra estancia juntos.
Todo lo que compartimos, lenguaje, palabras, comentarios nos fue formando una identidad como amigos y hacia que los demás se identificaran con nosotros los primeros en consolidarnos como hermanos-amigos, Gio, Cach, Carpio y Yo por ahí también
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